Amo el Día de la Madre.
Tengo una gran estima para aquellos que desempeñan el papel de la madre.
¿Qué es más importante que ser una herramienta de Dios para la formación de un alma humana?
Las madres se enfrentan a todo: cambian de pañales, consolan de pesadillas nocturnas, cuidan de los enfermos, tienen conversaciones con maestros y profesores, testigos de actuaciones aburridas, hacen pasteles de cumpleaños, lavan ropa.
No todo está aquí, porque las madres están a la vanguardia en la asignación de la configuración de sus hijos o hijas una visión bíblica del mundo y las cosas, junto con una moralidad saludable. Es una tarea que requiere abundantes dosis de amor y paciencia, de misericordia y perdón y no creo que todo esto sea lo suficientemente reconocido.
Es por eso que amo la existencia de un día nacional en el que consideramos y mejoramos el papel de la madre.
Sin embargo, mamá … tienes que leer esta declaración: ser apreciado no puede ser tu propósito.
“Honrarás a tu padre y a tu madre,
para que tus días estén largos en la tierra
que lo eterno, tu dios, te da «
Los niños deben honrar absolutamente y amar a su madre (por ejemplo, 20:12), pero si los apreciados constituyen su razón para ser, si persigue su aprecio con una apariencia súper vigilante en cada situación, en todos los lugares y en todos los intercambios relacionales, esto le dañará tanto a usted como a su hijo.
Soy padre de cuatro hijos, ahora adultos, y no recuerdo que alguna vez haya habido un día en que uno de ellos, entrando en la puerta, se volviera directamente a mi esposa Luella diciendo: «Mamá, en el autobús, mientras me fui a casa, pensé en cuánto lo hiciste en todos estos años. Viviste conmigo y para mí desde el momento en que nací hasta la fecha.
Ni siquiera tuve que consolar a mi hija mientras él dijo: «Pensé en ti y mi madre y me doy cuenta de lo desafortunado que era tan culpable por no haberte apreciado más. ¡Lamento no haberte comprometido a mostrarte mi gratitud a diario!»
Si esto te sucede, ¡prepárate para erigir un monumento o encender una antorcha perenne!
La tendencia de los niños, por otro lado, especialmente cuando crecen, es estar cada vez más orientada hacia ellos mismos y su interés, en lugar de ser conscientes del bien recibido y apreciado, a este respecto, a los demás. Entonces, mamá, incluso si es correcto y bueno ser apreciado, no espere que su hijo o hija estén naturalmente preparados para expresar constantemente su gratitud.
Es posible que sin darse cuenta, haya ingresado este acuerdo tácito con su hijo: «Te sirvo, me aprecias». Entonces, sucede que cada vez que lo sirves y tu gesto de sacrificio no se nota, tu corazón será tentado y llevado al desánimo, la ira y la desesperación precisamente hacia esa persona que Dios te ha llamado a amar y cuidar.
Si esto sucede, no es bueno para ninguno de ustedes.
Incluso en el papel de la Madre, continúa buscando su identidad, su propósito y su fuerza verticalmente, en el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo; No busque todo esto horizontalmente en su hijo o hija.
Traducción de Emanuela Artioli
Para meditar nuevamente sobre el tema de la maternidad, recomendamos suficiente mamá, ed. Coram deo.
Suficiente mamá
Temas: ansiedad, mujeres, educación de niños, familia, feminidad, niños, padres, aliento y exhortación, maternidad, vida cristiana
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Giulia Capperucci